Hace 78 años, comenzó un proyecto que cambió para siempre la educación en Ecuador. La Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), ha evolucionado para responder a las demandas cambiantes de la sociedad y del mundo. Se ha consolidado como un referente en la educación, la vinculación con la sociedad, la investigación y la sostenibilidad. Con una visión transformadora, hoy continúa ampliando su impacto, comprometida con un futuro inclusivo y responsable con el entorno.
Una educación que transforma y contribuye con la sociedad
La PUCE es pionera en la transformación de la educación superior en Ecuador. No solo fue la primera universidad privada del país, sino también la primera en abrir facultades como Teología y Enfermería. Actualmente, se destaca como la universidad con la mayor oferta académica en Ecuador según la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt). Cuenta con 482 programas de grado y posgrado, incluyendo modalidades en línea y nuevas carreras de Odontología y Medicina Veterinaria. Esto responde a una visión inclusiva que facilita el acceso a la educación superior y fomenta una formación profesional acorde a las necesidades actuales.
Esta transformación educativa se refleja en varias iniciativas. Entre ellas, la Facultad Internacional de Innovación PUCE – Icam, que ofrece programas adaptados a las demandas del mundo actual. Con la creación de PUCE TEC, la universidad ha ampliado su oferta académica con carreras técnico-tecnológicas. Así, facilita el acceso a la educación superior y la democratización de una educación de calidad, necesidad cada vez más urgente a nivel global.
PUCE Sostenible: reconciliación con el entorno
El compromiso de la PUCE con la sostenibilidad se concreta en su eje PUCE Sostenible. Inspirado en la encíclica Laudato si‘ del Papa Francisco, este proyecto llama a la protección de nuestra Casa Común. Además de liderar la campaña 1 millón de árboles para Ecuador, recientemente, la PUCE fue reconocida con el certificado ecuatoriano ambiental Punto Verde.
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Un logro que refleja el esfuerzo conjunto de toda su comunidad universitaria en la implementación de prácticas ambientales responsables. Como Punto Verde, la PUCE ha trabajado para reducir el consumo de agua y energía, gestionar los residuos de manera adecuada y optimizar el uso de los recursos naturales.
El rector de la PUCE, Fernando Ponce León S.J. reafirma esta visión al mencionar que «la PUCE aborda la sostenibilidad con visión de reconciliación del ser humano con el entorno». Esta certificación representa solo un paso en el camino hacia un futuro más verde, que la universidad continuará fortaleciendo con cada esfuerzo.
Conocimiento que transforma
La trasformación de la PUCE no se queda ahí. La universidad es un núcleo de conocimiento y desarrollo científico en el Ecuador. Su enfoque en la investigación ha dado frutos en áreas como las ciencias biológicas y la biodiversidad. Esto mediante proyectos icónicos como el Herbario QCA, el Museo de Zoología QCAZ y la Balsa de los Sapos, que preservan y estudian la riqueza natural del país. Asimismo, el Bioweb Ecuador se ha convertido en el mayor repositorio de biodiversidad en Ecuador, con información detallada de más de 9.000 especies.
En salud, el Centro de Investigación para la Salud en América Latina (CISeAL), en el campus Nayón, se ha consolidado como un referente nacional. Desde allí, se impulsan estudios en epidemiología, genética y medicina tropical. Con el Centro de Estudios Aplicados en Química (CESAQ), también se abordan temas críticos como la contaminación de alimentos y los riesgos ambientales. Estas investigaciones buscan mejorar el bienestar social y promover un desarrollo sostenible en el país.
En innovación aplicada, el desarrollo de la cerveza Quito, 1566, utilizando antiguas levaduras, ilustra el ingenio de la universidad para conectar la ciencia con el patrimonio cultural.
Proyectos de vinculación, el centro de la PUCE es la persona
El compromiso social de la PUCE se refleja en numerosos proyectos de vinculación. Estos buscan mejorar la calidad de vida en comunidades vulnerables. Las iniciativas abarcan áreas como salud, educación y desarrollo comunitario. No solo benefician a la población ecuatoriana, sino que también fomentan una educación práctica y comprometida entre los estudiantes.
En la PUCE, el enfoque centrado en la persona es una prioridad. Este modelo educativo no solo se orienta a la excelencia académica, también se basa en el desarrollo integral de los estudiantes. En la formación que ofrecemos, se fortalecen valores como la empatía, el respeto y el servicio a la comunidad. La PUCE prepara a sus alumnos para enfrentar los desafíos del mundo real. Así, se asegura de que su formación trascienda las aulas y se traduzca en un impacto positivo en la sociedad.
78 Años de historia y transformación
Todo este trabajo ha puesto a la PUCE entre las universidades más prestigiosas del planeta. Según el ranking QS, la universidad está entre las 1.000 mejores del mundo, las 100 de la región y la primera en reputación académica y en empleabilidad en Ecuador.
Así, desde aquel 4 de noviembre de 1946, cuando se fundó como la primera universidad privada del Ecuador, la PUCE ha sido un referente en la educación superior. Con siete sedes, 14 campus y más de 80.000 graduados, la PUCE ha liderado con una visión integradora, ambiental y centrada en el ser humano. Su enfoque de ser más para servir mejor refleja la misión y visión compartida con la Compañía de Jesús, comprometida con un mundo más justo, donde el servicio a los demás sea una realidad constante.
¡Celebremos juntos este aniversario, porque somos educación que transforma!
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