A casi 34 años del asesinato de los mártires de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), la Iglesia de El Salvador abre su proceso de canonización. Seis sacerdotes jesuitas y dos colaboradoras fueron asesinados en 1989. El contexto fue la guerra civil salvadoreña, que se vivió de 1979 a 1992.

«Nuestra Conferencia Episcopal ha iniciado el proceso de canonización de un grupo de mártires del reciente conflicto armado sufrido en el país», dijo el Arzobispo del San Salvador, José Luis Escobar Alas, según medios del país centroamericano.

El 16 de noviembre de 1989, en el campus de la UCA El Salvador, militares salvadoreños mataron a un grupo de sacerdotes y sus colaboradoras. Un crimen que marcó a El Salvador, al mundo y a la Compañía de Jesús.

Proceso de canonización

El proceso de canonización implica recopilar todos los detalles relacionados con las personas asesinadas. Así también, deberán documentar las razones detrás de sus asesinatos y por las que son considerados mártires.

Además de los ocho mártires de la UCA, también se espera canonizar a 39 personas más. Ellas también fueron víctimas de la guerra salvadoreña por difundir el Evangelio.

Un poco de historia

La UCA El Salvador, una institución jesuita, está comprometida con la promoción de la justicia social y los derechos humanos en El Salvador. En 1989, esa doctrina la puso en conflicto con el Gobierno y los grupos de poder.

Los sacerdotes jesuitas asesinados defendían a los pobres y criticaban las desigualdades y violencia en la sociedad salvadoreña. Su muerte sirvió para poner en relieve las injusticias y los abusos que se estaban produciendo en el conflicto armado.

Por eso, los mártires de la UCA se convirtieron en un símbolo de la lucha por la justicia y la paz en América Central y el mundo.

Así, esta historia demuestra el compromiso de la Compañía de Jesús con los valores de la justicia social, la educación y la promoción de los derechos humanos. Compromiso que trasciende las palabras y se evidencia en hechos incluso al punto de ofrendar la vida.

Finalmente, el sacrificio de estos mártires continúa inspirando a las personas a abogar por un mundo más justo y equitativo. La filosofía de amor y justicia de la Compañía de Jesús está presente en todas sus obras. Entre ellas,  la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE).

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