El Magis 2023 reunió a jóvenes de más de 80 países alrededor del mundo, con una misma afinidad a la espiritualidad ignaciana. Esto dentro del marco de la Jornada Mundial de la Juventud 2023 (JMJ). El encuentro Magis 2023 se desarrolló del 22 al 31 de julio de 2023 en Lisboa, Portugal.

Tatiana Ubieda, graduada de Psicología Clínica de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), nos cuenta su experiencia en este encuentro juvenil de gran impacto.

¿Qué te inspiró a asistir al evento Magis 2023 y cuáles eran tus expectativas antes de llegar?

Mi principal inspiración fue la espiritualidad ignaciana. En la PUCE descubrí un sentido más profundo de la vida, tanto espiritual como emocional. Por eso, la idea de encontrar a otros jóvenes que compartieran esta misma conexión espiritual me emocionaba enormemente. Tocaba una fibra sensible en mi corazón, era un anhelo que llevaba mucho tiempo albergado.

Foto: cortesía de Tatiana Ubieda.

A este evento fui con la intención de aprender, experimentar, sentir y, tal vez, encontrar algunas respuestas más profundas sobre mi vida.

No voy a negar que me sentía un poco nerviosa. El idioma era una preocupación. Antes de viajar, me preguntaba cómo me comunicaría con jóvenes de Asia y otras partes del mundo. Al llegar, esos miedos desaparecieron. Estoy agradecida por la oportunidad y las experiencias que este evento me brindó.

El Magis 2023 se enfocó en crear un futuro de esperanza. ¿Cómo contribuyó esto a tu crecimiento espiritual?

Durante el evento, reflexionamos sobre el concepto mismo de esperanza y su trascendencia. Para mí, cada amanecer se ha convertido en una ventana hacia nuevas oportunidades y una renovación constante de esperanza.

En este encuentro, reconocí que Dios sigue contemplando al mundo y a cada uno de nosotros con una mirada cargada de esperanza. La comprensión de la espiritualidad ignaciana me ayudó comprenderlo así.

Este reconocimiento, de que cada día se nos brinda un nuevo comienzo, me infundió la convicción de que como jóvenes albergamos un vasto potencial. Además, me convencí de que podemos ejercer una influencia significativa en la sociedad.

En ocasiones, los jóvenes nos podemos sentir desanimados o no escuchados. Sin embargo, un mensaje impactante que recibí durante este encuentro fue el llamado a desterrar el miedo. También, a confiar en nuestras capacidades para hacer el bien.

En el Magis 2023, los jóvenes trabajaron en varias experiencias. ¿cuál fue tu eje de acción y cómo lo abordaste?

Mi experiencia se centró en el ámbito del servicio y la solidaridad. Fuimos a una ciudad cercana a Lisboa. Allí compartí con jóvenes de España, Francia, Portugal y Ecuador. Nuestra labor se desarrolló en colaboración con la organización jesuita de Portugal llamada Gambozinos.

Participamos en diversas actividades enriquecedoras. Desde juegos y dinámicas con niños de diferentes estratos sociales hasta visitas a los hogares de las familias beneficiarias. Experimentamos un profundo sentido de conexión. La generosidad y apertura de estas familias nos conmovieron profundamente.

La barrera del idioma no resultó obstáculo alguno ya que, la comunicación se construyó en el lenguaje universal de la comprensión y la empatía.

¿Participaste también en la Jornada Mundial de la Juventud 2023? ¿Cómo fue tu experiencia?

Sí, mi experiencia culminó con una vivencia conmovedora durante la Jornada Mundial de la Juventud 2023, donde fui acogida por una familia cálida y amorosa.

En una de las vigilias, la voz del Papa Francisco resonó en nuestra conciencia. Nos recordó que debemos ser agentes del cambio. Esto se traduce en hacer ruido, en dejar una huella palpable y ser raíces de alegría para otros.

Fue una experiencia verdaderamente hermosa. Tendrá un significado duradero en mi corazón.

¿Cómo planeas llevar los valores y enseñanzas alcanzados en estos espacios a tu vida cotidiana y a tu comunidad?

Estos eventos reavivaron mi compromiso de persistir en la búsqueda de un futuro lleno de esperanza. Quiero seguir cultivando y trabajando en mi vida espiritual.

Sé que en este camino espiritual no estoy sola. Puedo encontrar el apoyo y el acompañamiento de muchos jóvenes en todo el mundo.

Me llevo la inspiración para enfrentar los desafíos sin temor, confiar en mis habilidades y contribuir activamente para generar un cambio positivo en la sociedad. Todo en pos de un mañana más alentador para todos.

Seguiré trabajando con amor. Sin duda, en este encuentro, todos recordamos nuestra labor de ser más para servir mejor.

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