El 22 de marzo de 2023, se cumplen cinco meses de la última alerta amarilla por la actividad del volcán Cotopaxi. La declaratoria emitida por el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y Emergencias (SNGRE) alarmó a la población aledaña.

Cada año, ocurren decenas de erupciones volcánicas en todo el mundo, algunas de las cuales pueden ser muy destructivas.

La erupción de un volcán puede generar flujos de lava, ceniza, gases tóxicos, explosiones, entre otros fenómenos. La Dra. Olga Mayorga, geógrafa y coordinadora de la carrera de Ingeniería Ambiental de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), analiza algunos puntos importantes sobre el volcán Cotopaxi.

El Instituto Geofísico de Ecuador (IG) aseguró que el volcán Cotopaxi se encuentra en proceso eruptivo moderado desde mediados de octubre de 2022. ¿Qué ocurre en el volcán Cotopaxi?

El 26 de junio de 1877, se registró la erupción más violenta del volcán Cotopaxi. El desastre natural dejó alrededor de 300 muertos y cientos de heridos. Luego de este acontecimiento, el volcán reposó. Sin embargo, el imponente coloso despertó el 14 de agosto de 2015.

Desde entonces, su actividad ha sido minuciosamente monitoreada por el Instituto Geofísico del Ecuador (IG). El 22 de octubre de 2022, el volcán se activó con la presencia de vibraciones, gases y ceniza. Ante esto, los investigadores declararon en alerta amarilla a la zona de influencia del volcán Cotopaxi.

Pero, ¿qué significa esta alerta amarilla?

Es un aviso de activación de amenaza. En esta fase, se sugiere preparar y revisar los planes de contingencia y familiar. Es necesario tener lista una mochila de emergencia, especialmente, si las personas viven en poblaciones o localidades cercanas al volcán.

En fin, estos datos relatan la historia de un volcán que dice: ¡Estoy aquí, no me he dormido! Los períodos nos permiten tener información de lo ocurrido.

Asimismo, con este historial, podemos generar mapas de ruta que ayuden en el caso de una erupción.

¿Qué es la erupción volcánica? ¿Por qué existe preocupación por una posible erupción del Cotopaxi?

La erupción volcánica es un fenómeno geológico. Se produce por el calentamiento del magma del interior de la tierra, el mismo que busca salir por los volcanes. Igualmente, el choque de la placa tectónica de Nazca en la cordillera de los Andes genera gran actividad sísmica y volcánica en la región.

En la parte de la cordillera de los Andes que atraviesa Ecuador, existen 84 volcanes. De ellos, 27 son potencialmente activos y 4 están en actividad: Sangay, Tungurahua, Reventador y Cotopaxi.

De estos, el Cotopaxi, al ser un estratovolcán, es considerado uno de los más peligrosos del mundo. La frecuencia de sus erupciones, estilo eruptivo, inclinación del cono volcánico, cobertura glaciar y la cantidad de asentamientos poblacionales son factores de alto riesgo.

Ante una erupción, la mezcla del glaciar y lava provocarían lahares espesos con inundaciones de lodo. Todo esto derivaría en destrucción total en las zonas aledañas.

Según los escenarios establecidos por el IG, una erupción del Cotopaxi afectaría a zonas pobladas de cuatro provincias: Cotopaxi, Pichincha, Tungurahua y Napo.

Los volcanes son fenómenos maravillosos que, si no afectan a la población, se admiran como una respuesta pura de la naturaleza. Sin embargo, al volcán Cotopaxi no podemos disfrutarlo como tal, porque está rodeado de lugares poblados. Por ejemplo, Latacunga, Salcedo y Machachi que, tristemente, serían afectados y algunas zonas desaparecerían en una eventual erupción.

¿Es probable que alguna vez veamos una erupción fuerte del volcán Cotopaxi?

No podemos predecir estos acontecimientos. Sin embargo, es muy probable que alguna vez veamos una erupción fuerte del volcán Cotopaxi.

Para muchos, estas alertas se han convertido en un cuento de “ya viene el lobo”. Llevan tantos años escuchando sobre una posible erupción del volcán que ya no lo creen. No obstante, esto es real y, tarde o temprano, pasará. Nuestro deber es mantenernos alertas.

¿Qué daños pueden provocar las erupciones volcánicas?

La caída de ceniza o expulsión de gases generan riesgo de contaminación del agua. Asimismo, afectan a los sembríos, ganado, animales domésticos y, en general, al medioambiente.

Por otra parte, los efectos más comunes sobre la salud incluyen lesiones traumáticas, quemaduras, problemas respiratorios y enfermedades en la piel.

¿Qué podemos hacer antes durante y después de una erupción volcánica?

En estos casos, las fuentes oficiales de información nos ayudarán a monitorear las fases del volcán. Aunque sabemos cuándo pasará la catástrofe, podemos estar atentos a las señales del volcán.

Las alertas nos permiten poner en marcha los planes de contingencia. La Secretaría de Gestión de Riesgos de Ecuador menciona algunas medidas de seguridad en caso de una erupción.

También, un punto importante es organizar a la familia. En caso de una erupción, la familia debe generar rutas de movilización. Por ejemplo, ¿cómo actuarán si la esposa trabaja en el valle de los Chillos y todos viven en Quito? ¿Se quedará allá? ¿Con quién permanecerá?

Son preguntas claves para quienes tengan familiares trabajando o viviendo en otras ciudades afectadas por el volcán.

Espero que nunca pase, pero si un desastre como estos surge, estoy segura de que nuestra sociedad se volvería a levantar. El terremoto de 2016 y el COVID-19 nos demostraron que somos resilientes. Unidos podemos hacer más.

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