En los años 50, el investigador ecuatoriano Emilio Estrada definía por primera vez la cultura Machalilla. Un pueblo precolombino del período formativo. Años más tarde, investigadores ecuatorianos y extranjeros, entre ellos, el Padre Pedro Porras aportaban con sus hallazgos al conocimiento de esta cultura.
Por más de 30 años, no se supo más de la cultura Machalilla, ubicada en la costa ecuatoriana, de la que se tiene poco conocimiento, hasta que en 2017 tres arqueólogos decidieron adentrarse en ese mundo.
Así, en la exposición temporal Ayangue 1000 a.C.: Fragmento de la vida Machalilla se conocerán los resultados de esta investigación. Estudio que fue realizado por Heiko Prümers, del Instituto Arqueológico Alemán, María Fernanda Ugalde y Eric Dyrdahl, docentes e investigadores del Laboratorio de Arqueología de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE).
Exposición Ayangue 1000 a.C.: Fragmento de la vida Machalilla
En 60 minutos, conocerás las investigaciones arqueológicas, la historia y vida cotidiana de esta cultura ancestral. Además, aprenderás sobre su población actual y te acercarás a la construcción de la memoria patrimonial.
La muestra presenta los resultados clave de las investigaciones arqueológicas desarrolladas entre 2017 y 2022 en las comunidades de Machalilla y Ayangue.
“En esta exposición, se encuentra una síntesis de las investigaciones arqueológicas realizadas en Machalilla y Ayangue. Además. Esta incluye una síntesis sobre la población actual y cómo, desde la academia, nos vinculamos con otros sectores de la sociedad. También, los nexos que se establecen con la comunidad de Ayangue y los museos, que son los espacios para difundir los conocimientos alcanzados.” Así explica la arqueóloga María Fernanda Ugalde esta muestra.
Entre los hallazgos más importantes se encuentran: la localización del primer poblado Machalilla en la bahía de Ayangue (pudiéndose definir por primera vez detalles del patrón de asentamiento). Además, un basural de la cultura Chorrera en la localidad de Machalilla, el hallazgo de lo que podría ser el artefacto más temprano de bronce en un contexto arqueológico, entre otros.
Un recorrido inmersivo
La muestra inicia con una revisión de la memoria e investigaciones que la cultura Machalilla ha tenido hasta la realización del proyecto de la PUCE y el Instituto Arqueológico Alemán. Todo esto a manera de línea de tiempo.
Más adelante, podrás convertirte en arqueólogo. Tienes a tu disposición, un espacio emulado de la Cumbre de Ayangue, sitio de la excavación de estos investigadores. Aquí, obtendrás información del trabajo de campo, manipularás herramientas, encontrarás fragmentos, descubrirás e interpretarás los hallazgos del proceso.
Siguiendo el recorrido, conocerás las visiones y contextos de los artesanos y trabajadores de esta cultura que nos antecedió en el tiempo. Te aproximarás a los fragmentos y su iconografía a través del encuentro con diversas opciones de interpretación y propuestas artísticas.
Al final de la muestra, observarás a la población de Ayangue en la actualidad. Fotografías y videos evidencian el aporte que la investigación brindó a la comuna. Además, cómo esta se ha apropiado y ha puesto en valor la investigación arqueológica, generando dinámicas para la acción social y cultural del sector.
Finalmente, tendrás un espacio de interpretación personal. Ahí podrás expresar la experiencia vivida sobre la cultura Machalilla, mediante el uso de varios materiales didácticos, artísticos y artesanales. Una muestra en la que tú serás el protagonista.
Otros datos
La exposición Ayangue 1000 a.C.: Fragmento de la vida Machalilla estará disponible en el primer piso del Centro Cultural de la PUCE hasta fines de marzo. Puedes agendar tu visita escribiendo a los correos electrónicos: rjgutierrez@puce.edu.ec, jmpaz@puce.edu.ec o llamando al teléfono: 02 299 1700 extensiones 1710 y 1681.
“Una muestra de primera calidad que pone en contexto las piezas encontradas y el trabajo de excavación, contando historias. Una experiencia muy impresionante en la que tocas la arqueología”, comentó el doctor Philipp Schauer, embajador de Alemania y visitante de la exposición.
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