En la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), para los estudiantes de odontología, ponerse el uniforme ya no es solo cumplir con el reglamento. Valerya y Andy, estudiantes de la primera promoción de Odontología, señalan que su vestimenta se ha transformado en un símbolo de orgullo, identidad y proyección profesional.
Cuando Andi Pulgar se puso por primera vez el uniforme de Odontología, supo que no era cualquier prenda. “Sentí una conexión especial con la universidad”, recuerda con una sonrisa.
Una imagen que inspira
El uniforme de Odontología marca un antes y un después en la imagen de la universidad. No solo viste a los estudiantes, sino los proyecta como profesionales desde el primer semestre, transmitiendo confianza y vocación.
Para Andi, el uniforme “es como demostrarte frente a los futuros pacientes, como te ven los demás y cómo tú decides servir”. Asimismo, Valerya Guaña, recuerda la emoción del primer día. “Es una señal de que estamos listos para empezar algo grande. Lo ven tus padres y tus amigos. Se sienten orgullosos y eso te impulsa” .
Ambos coinciden en que el uniforme no es un disfraz ni un símbolo vacío. Es una promesa personal y profesional.
Identidad PUCE en cada puntada
Cada aspecto del uniforme, desde el color hasta el diseño, fue cuidadosamente elegido para reflejar la excelencia académica y comunicar los valores que la PUCE promueve en su formación integral.
Andi lo tiene claro: “el uniforme simboliza una gran responsabilidad. Pero también un camino de crecimiento y entrega. Aquí no solo estudias, te formas para servir”.

Para ambos, estudiar Odontología en la PUCE no es solo aprender sobre salud bucal. Es también formarse como ser humano, profesional y ético. Es así que, con el uniforme puesto y con mucho orgullo, ya se sienten listos para sonreírle al futuro.