Para Belén Pazmiño, colaboradora de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), venir en auto al trabajo significa utilizar entre 40 a 50 minutos de su día. Mientras que con la bicicleta experimenta un ahorro de 20 minutos diarios a la vez que hace ejercicio.
“Vengo en bicicleta porque además de ahorrarme tiempo siento una paz y una libertad increíble. Hago ejercicio y libero el estrés”, comenta Belén, quien todos los días viene de su hogar ubicado en Las Casas, sector centro norte de Quito, a la PUCE en bicicleta.
Pero para esta ciclista urbana, como para varios estudiantes, docentes y administrativos, quienes utilizan otros medios de transporte alternativos al auto, esta decisión también pasa por un tema de sostenibilidad ambiental.
Sin lugar a dudas, los autos son los principales emisores de CO2, uno de los gases causantes del efecto invernadero. Este fenómeno natural eleva la temperatura del planeta y desequilibra su sostenibilidad.
El aporte de la PUCE
Con este panorama, la PUCE quiere contribuir para tener una ciudad sustentable que proteja el ambiente y mejore la calidad de vida de sus habitantes, a través de la implementación del Día Sin Auto en la PUCE. Así, este 31 de agosto te invitamos a que dejes tu auto en casa y seas parte de esta iniciativa.
“Hemos identificado en la universidad que uno de los mayores impactos ambientales es a través de los formatos de movilización. Al mismo tiempo, en la ciudad y en el mundo otras maneras de movilizarse empiezan a ganar espacio”, explica Xavier Barriga Abril, coordinador del Proyecto Transmedia para el transporte de la PUCE.
El Día Sin Auto PUCE
La idea del Día Sin Auto PUCE nace del Proyecto Transmedia para el transporte de la Comisión PUCE sustentable. Esta iniciativa se basa en los lineamientos de Laudato Si’, encíclica que busca llamar la atención por el deterioro del planeta Tierra.
Ese día, se espera incentivar a la comunidad universitaria a venir a la PUCE Matriz por otros medios que no sean el auto (bici, escúter, a pie, bus, auto compartido, etc.). Para esto, se ha establecido una caravana que saldrá desde tres puntos de la ciudad hasta la universidad. Desde el norte (Cruz del Papa, la Carolina), en el centro (La Plaza Grande) y desde el sur (Tribuna del Sur). Conoce el mapa de rutas.
Además, se realizarán varias actividades lúdicas y de entretenimiento para la concienciación sobre el uso del auto. Entre los eventos programados está la transmisión de una película, la implementación de cosmos/arcade (máquinas de juego), espectáculo de acrobacias y un taller de mecánica básica para bicicletas.
“La idea es que esto se vuelva cotidiano. Esperamos que paulatinamente, esta iniciativa sea más frecuente y que en algún momento tengamos implementado en la PUCE un día sin auto a la semana”, finaliza Xavier Barriga Abril.
Para muchos una mañana típica, al salir de casa, empieza en un auto, con el estrés del tráfico, el ruido de los pitos y por ahí algún conductor imprudente que se nos atraviesa. ¿Te imaginas dejar el auto en casa y cambiar ese panorama por aire limpio, sin ruido y con paz? Reduce tu huella de carbono y deja una huella positiva en el planeta.
Si quieres participar en esta iniciativa regístrate aquí: bit.ly/diaSinAutoPUCE.
Gracias por esta nota tan linda!!…Ojalá esto animé a muchas personas más a usar transportes alternativos, que ayuden no solo al ambiente sino también a mantenernos saludables.
Funciona en la medida en que se dispongan de opciones de movilidad en trayectos largos, para quienes tenemos que venir a estudiar desde la mitad del mundo es imposible venir en bici, en lugar de ayudar complican. No sólo debe ser una buena idea sino una que aporte sin complicar al resto.
Estimado Juan. Gracias por tu comentario, todo aporte es importante para la PUCE. Te contamos que para unirse a esta iniciativa voluntaria puedes venir al campus en cualquier otro medio alternativo (bici, escúter, a pie, bus, auto compartido, etc.)
Los cambios tienen que darse a nivel ciudad, sin embargo, si podemos darnos al menos un día para reflexionar acerca del impacto ambiental que tienen nuestras acciones cotidianas ya es bastante.