En el marco de la conmemoración de la fundación de los 489 años de la capital, el Municipio del Distrito Metropolitano de Quito entregó condecoraciones a personas destacadas en diversos campos. En este contexto, seis docentes, investigadores y alumni de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE) fueron homenajeados.
Los premios municipales
Los Premios Municipales para las Artes y las Ciencias 2023 reconocieron a las mejores obras intelectuales, creaciones y producciones culturales del Ecuador. El evento se llevó acabo el 1 de diciembre en el Palacio de Cristal del Parque Itchimbía.
En la convocatoria de 2023, se presentaron 276 obras, de las cuales se premiaron 21. Entre las categorías reconocidas, para la PUCE se encuentran:
Premio Isabel Tobar Guarderas (ciencias sociales)
María Belén Garrido fue premiada por su obra Rupturas presidenciales: las acciones de la fuerza pública ante movimientos noviolentos del Ecuador en 1997, 2000 y 2005. La doctora Garrido es exalumna de la Facultad de Ciencias Humanas.
Sobre la obra
El libro profundiza en por qué fue mínima la represión de la fuerza pública a los movimientos noviolentos de Ecuador durante tres crisis presidenciales:
- Abdalá Bucaram, 1997,
- Jamil Mahuad, 2000 y
- Lucio Gutiérrez, 2005.
En su análisis, la autora examina las características e historia de represión de la fuerza pública en el Ecuador. Además, cómo fueron sus relaciones con los presidentes de turno y con diversos actores de la sociedad ecuatoriana.
“Recibir este premio es un verdadero honor para mí. No esperaba que me seleccionen entre los 25 libros que se presentaron. Recibir este premio representa una gran responsabilidad. La asumo con compromiso para seguir compartiendo investigaciones similares”, comentó María Belén.
Premio Enrique Garcés (ciencias biológicas)
El libro Dolor agudo. Fisiopatología-Diagnóstico-Tratamiento también obtuvo un reconocimiento. Esta obra fue realizada por varios colaboradores, entre ellos Héctor Martínez y Pablo Martínez, docentes de la Facultad de Medicina.
Sobre el libro
Este libro explora la transición actual lejos de los opioides hacia métodos alternativos, desde fenciclidinas hasta neurolépticos, para aliviar el dolor. Desde la evolución de la terapia del dolor en 1973 con la Asociación Internacional para el Estudio del Dolor (IASP), se abandonaron fármacos como la pentazocina y la meperidina debido a complicaciones graves.
En la historia de la investigación con compuestos como remimazolam o buprenorfina, se destaca la importancia de entender los fundamentos de la algología para tratar el dolor y el cáncer. Este es un conocimiento crucial para los profesionales en este campo.
“Este premio fue inesperado. Tras un año de investigación entre varios colaboradores, nuestra obra tuvo un gran reconocimiento. Esto nos motiva a seguir con nuestro trabajo en beneficio de la ciencia”, expresó Héctor Martínez.
Premio Joaquín Gallegos Lara (cuento)
Edwin Alcarás, docente de Español para extranjeros del Centro de Educación Continua (CETCIS), obtuvo el premio por su libro Tras la tormenta. Este es un manuscrito de 18 historias que recopila hechos y vivencias del pasado familiar de Edwin.
“Las expresiones artísticas y literarias son fundamentales para otorgar significado a la vida humana. Me siento afortunado, reconozco que no es únicamente mérito propio, sino que es el reflejo de las capacidades y talentos que la vida, a través de dones concedidos por Dios, me ha permitido desarrollar”, dijo Edwin.
Premio Jorge Carrera Andrade (poesía)
Mientras que María Auxiliadora Balladares, exalumna de la maestría de Literatura de la PUCE, obtuvo un galardón por su obra Acantile Duerme Piloto.
Se trata del cuarto poemario de esta autora. El libro contiene doce poemas de amor, cada uno ambientado con un epígrafe y el extracto de una canción.
«Es un verdadero honor para mí. Este premio ha sido otorgado a lo largo de los años a varios poetas que admiro profundamente. Ser seleccionada fue un reconocimiento a mi vida dedicada a la escritura poética», compartió María Auxiliadora.
Condecoraciones por méritos
En este marco de celebración, también se llevó acabo un acto de condecoraciones. El Concejo Metropolitano de Quito reconoció por méritos a varias personas que han destacado por su servicio a la capital. Los reconocimientos fueron entregados por Daniel Noboa, presidente del Ecuador, Pavel Muñoz, alcalde de Quito, y los concejales metropolitanos.
Los reconocimientos fueron entregados por Daniel Noboa, Presidente de la República del Ecuador, Pavel Muñoz, Alcalde de Quito y los concejales metropolitanos.
Condecoraciones 2023
Juan Carlos Velasco, director del Coro de la PUCE, recibió la condecoración Pedro Pablo Traversari. Este galardón se entrega a personalidades destacadas en el mundo de las artes musicales.
Por más de 36 años, Juan Carlos ha formado coros en barrios desfavorecidos de Quito. Asimismo, ha enseñado a niños de escasos recursos. Así, busca ofrecer oportunidades mediante la música, dejando una huella profunda en cada individuo que alcanza con su arte.
“Me siento agradecido. La verdad, no me lo esperé. Recibí una llamada informándome que habían seleccionado mi perfil para esta condecoración. Agradezco a las personas que me han apoyado y han creído en mí”, agregó Juan Carlos.
Asimismo, el DMQ otorgó a David Romero Estévez, investigador del Centro de Estudios Ambientales y Químicos (CESAQ) de la PUCE, la Condecoración Eugenio Espejo. Este reconocimiento honra a destacadas personalidades en las ciencias biológicas y naturales.
David Romero fue homenajeado por su mérito científico debido al impacto de sus investigaciones y publicaciones en el área de la contaminación de alimentos con metales pesados. Su trabajo es relevante tanto para la salud humana como para el ambiente del DMQ y de Ecuador.
“Esto no es solo para mí, sino para todo el laboratorio de CESAQ. Estoy feliz, quiero seguir innovando y llevando la investigación siempre un paso más allá”, expresó David Romero.
Estos reconocimientos refuerzan el compromiso de la PUCE y su comunidad por seguir impulsando la innovación y la excelencia. Así, nuestra comunidad universitaria deja un legado invaluable en la historia de la institución y de la ciudad.
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