Todo invento comienza con una idea. Algunas veces nace en un cuaderno de laboratorio, otras en una conversación entre colegas o incluso como respuesta a una necesidad urgente, pero lo que determina si esa idea se transforma en una solución rentable, en primera instancia, es qué tan bien se protege. En la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), cada avance científico tiene el potencial de convertirse en una solución real para los desafíos del mundo actual; en esta línea, las patentes son una herramienta esencial para lograrlo.

La historia de las patentes se remonta al Renacimiento, cuando reyes y Estados comenzaron a otorgar privilegios exclusivos a inventores que desarrollaban nuevos métodos, máquinas o productos. Hoy, una patente sigue siendo ese escudo legal que protege el ingenio humano: permite a su creador beneficiarse de su uso por 20 años, a cambio de divulgar el conocimiento al mundo.

Este intercambio entre protección e innovación ha sido clave en el desarrollo de la medicina, la tecnología, la energía y más. Las universidades, como centros de generación de conocimiento, tienen un papel protagónico en este proceso.

En este contexto, la PUCE fortalece su compromiso con la investigación que transforma realidades y la protección del conocimiento. Con dos patentes de invención ya concedidas y un ecosistema en crecimiento que promueve la cultura de la propiedad intelectual, la universidad avanza hacia un modelo en el que innovar también significa compartir, proteger y transferir.

Las dos patentes otorgadas a la PUCE tienen como base un mismo insumo natural: la tagua, también conocida como nuez de marfil. Desde este recurso vegetal, se han desarrollado procesos con alto potencial industrial:

1.Producción de bioetanol a partir de residuos de tagua (2024): una innovación que transforma residuos en etanol y subproductos aprovechables para la industria.

2. Obtención y aplicaciones de nanocelulosa de tagua (2023): permite extraer un biopolímero con posibles usos en medicina, cosmética y materiales biomédicos.

Ambos desarrollos son muestra del poder de las ideas cuando se convierten en invenciones protegidas, con impacto potencial en la sostenibilidad, la salud y la economía.

«La PUCE tiene inmenso potencial para el desarrollo de bienes intangibles susceptibles de protección en el campo de la propiedad intelectual, lo cual es producto de su diversidad académica e investigativa. En tal sentido, a manera de ejemplo, se puede afirmar que esta Universidad tiene potencial para generar patentes en varias áreas, como salud, biomedicina, ingeniería, sostenibilidad, energías limpias, agro alimentos, electrónica, robótica, entre otras”. Así mencionó el Ing. Fernando Calderón, coordinación Nacional de Enlace y transferencia del conocimiento de la PUCE.

Obtener una patente en Ecuador puede demorar más de cinco años, debido a múltiples factores y limitantes. Sin embargo, la PUCE sigue llevando sus invenciones a otro nivel.

Actualmente, la universidad ejecuta el programa Brigadas de Propiedad Intelectual, liderado por el Vicerrectorado de Investigación, Vinculación e Innovación. Esta iniciativa promueve entrevistas personalizadas entre investigadores y expertos legales para identificar desarrollos patentables y acompañar su proceso de registro.

Además, desde diciembre de 2024, la institución cuenta con un Reglamento Específico para la gestión de la Investigación, Vinculación e Innovación, que establece reglas claras sobre titularidad de derechos, transferencia tecnológica, participación en beneficios económicos y creación del Comité de Propiedad Intelectual.

La PUCE tiene altas capacidades para desarrollar más patentes en áreas como biomedicina, ingeniería, energías limpias, agroalimentos, robótica y sostenibilidad. Su diversidad académica e investigativa la convierte en un espacio fértil para ideas que pueden cambiar realidades.

Este 26 de abril, Día Mundial de la Propiedad Intelectual, la PUCE invita a su comunidad a seguir investigando y creando. Porque detrás de cada patente hay una historia, y detrás de cada historia, una idea que puede cambiar el mundo.

Aceras y casas con plomo: investigación PUCE enciende alertas en Ecuador

Share This