Una moto, una cámara y una misión científica. Así arrancó En Moto Contra el Chagas, el viaje del doctor Mario Grijalva por Latinoamérica para visibilizar una de las enfermedades más olvidadas del continente. Pero esta no es solo una travesía sobre ruedas, es un ejercicio de comunicación científica con rostro humano, donde paisajes imponentes, testimonios conmovedores y datos urgentes se entrelazan para contar la historia de una lucha contra el Chagas que aún no termina.

Con más de 30 años de experiencia investigando el Chagas, el doctor Mario, graduado de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE), académico de la Universidad de Ohio y fundador e investigador principal del Centro de Investigación para la Salud en América Latina (CISeAL), dejó temporalmente el laboratorio para crear un formato inédito de divulgación. Su travesía, que comenzó en 2022, mezcla aventura, paisajes, entrevistas y testimonios desde las zonas más afectadas de Argentina, Bolivia, Perú, Chile y Ecuador. Todo, a bordo de una moto y con una cámara en mano.

Quise unir mi pasión por la investigación con la necesidad urgente de comunicar. Aprendí a manejar moto, a grabar, a editar, y a contar historias que hablen de una realidad muchas veces invisible, pero no desde la tragedia, sino desde la esperanza”, afirma.

En cada parada, Mario entrevistó a médicos, científicos, técnicos de control vectorial y sobre todo, a las personas afectadas por la enfermedad. “Hay una potencia muy grande en yuxtaponer lo que dice el experto con lo que vive la señora de la tienda cuya madre tuvo Chagas. Así se construye una narrativa más completa, más humana”, explica.

Esta metodología ha dado vida a una serie documental con más de 100 entrevistas y más de 150 episodios en producción. Cada video se acompaña de reels dinámicos que resumen la historia o muestran momentos del viaje: caídas, comidas locales o conversaciones espontáneas. “Es una forma de enganchar, de atraer audiencias para luego introducir el mensaje clave: el Chagas existe, y todos podemos hacer algo”.

“No dejes que el chinchorro viva en tu casa (como se conoce en Ecuador al insecto Triatomino vector)». Ese es el mantra de este proyecto. Con un lenguaje claro y directo, Mario promueve mensajes de acción concreta: eliminar los vectores del hogar, exigir diagnóstico y tratamiento y reconocer que el Chagas no es un problema del pasado ni de otros. “En Ecuador, desde 2011, esta enfermedad quedó fuera de las prioridades de salud pública. Pero en países como Bolivia, Argentina o Chile, han logrado reducir significativamente los casos gracias a la continuidad en los programas de control”, explica.

La diferencia, añade, está en el compromiso sostenido, en la colaboración entre academia y gobiernos y en la inversión tanto nacional como internacional. En contraste, Ecuador aún carece de datos actualizados, diagnósticos masivos y campañas sostenidas. El científico menciona que sin datos es imposible actuar en cualquier solución.

El proyecto En Moto Contra el Chagas es también una vivencia personal. “Aprendí a ser más humilde”, dice Mario. “Aceptar la generosidad de quienes me ofrecieron un plato de comida o un lugar donde dormir, sin esperar nada a cambio, me cambió profundamente. Hay que bajarse del pedestal de los títulos y aprender a escuchar”.

La PUCE, a través de CISeAL, ha respaldado esta propuesta desde sus inicios. El doctor Juan Pablo Salgado, vicerrector de Investigación, Vinculación e Innovación resalta su impacto. “Esto no solo es ciencia de laboratorio, es ciencia en movimiento, transdisciplinar, hecha con y para la gente. Un documental que muestra que sí se puede transformar realidades desde la universidad”.

Lo que empezó como un viaje de exploración terminó convirtiéndose en una cruzada por la salud pública, la justicia y la educación. “Todos podemos ser investigadores”, insiste Juan Pablo. “No se necesita un título para cuestionarse, para buscar respuestas. La investigación está en las calles, en las casas, en las historias que muchos no cuentan”.

Mientras Mario edita nuevos episodios, prepara publicaciones científicas y libros con las entrevistas recogidas, el mensaje permanece firme. “El Chagas no se ha ido. Pero con compromiso, ciencia y comunicación creativa, todavía podemos ganarle la batalla”, concluye Mario.

Foto: Mario Grijalva junto a su moto.

Para conocer más sobre su recorrido científico puedes seguir a Mario en sus cuentas de Instagram, YouTube y TikTok.

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