El 25 de noviembre (25N), Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, nos invita a reflexionar sobre una realidad desafiante. Aunque las estadísticas pueden ser desalentadoras, las voces femeninas y diversas nos ofrecen estrategias, experiencias y acciones que inspiran el cambio.
En este marco, la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE) presentó una agenda pensada en promover el diálogo y generar consciencia. ¡ Es una invitación a la acción y al cambio colectivo!
25N, la acción es urgente
En el contexto de violencia que vive el Ecuador, existe un matiz de género. Es decir, la crisis de seguridad ha recrudecido y acentuado la violencia contra la mujer. De enero al 15 de noviembre de 2024, se registraron 215 femicidios. De estos, 107 mujeres fueron asesinadas en entornos familiares, según la Alianza Feminista para el Mapeo de Femi(ni)cidio en el Ecuador.
Además, se estima que a nivel regional al menos 11 mujeres son asesinadas por cuestión de género cada día. Este dato, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Desde instituciones públicas, privadas y organizaciones sociales, se han realizado múltiples iniciativas para prevenir y erradicar la violencia basada en género. No obstante, no se ha podido frenar la problemática.
Sin embargo, instituciones como la PUCE cuentan con protocolos y espacios como la Mesa de Género. El objetivo es definir estrategias para construir espacios seguros en la comunidad universitaria. Uno de los instrumentos es el Protocolo de actuación frente a casos de violencia de género . Este ofrece una ruta integral de atención a la violencia basada en género dentro de nuestra comunidad universitaria.
Recuerda que, si vives alguna forma de violencia en la universidad, puedes revisar la ruta. La PUCE cuenta con mecanismos para atender estos casos. NO ESTÁS SOLA.
#25N en Ecuador: 215 femi(ni)cidios desde enero hasta el 15 de noviembre de 2024. El 40,9% de esas muertes violentas ocurrieron en sistemas criminales.
— Karol E. Noroña (@KarolNorona) November 25, 2024
El Estado no garantiza la vida de las mujeres, impactadas directamente, también, por el fracaso de la política de seguridad 👇 pic.twitter.com/rwi7MOKWk4
La PUCE busca generar una acción sostenida
La Mesa de Género de la PUCE, y otras iniciativas de direcciones como Bienestar Estudiantil, buscanacciones permanentes para visibilizar y aportar a la reflexión y acción sobre la violencia. La intención firme es que las acciones no culminen con la semana por el 25N.
En esta línea está enmarcada la agenda propuesta por la PUCE para este año, que se extenderá hasta el 1 de diciembre. Puedes conocer la agenda completa de actividades aquí.
#JuntasSomosMásFuertes
Con tambores, pancartas y banderas, estudiantes, docentes e integrantes de área administrativa de la PUCE, recorrieron las instalaciones para conmemorar el 25N. La consigna principal de la marcha interuniversitaria fue: «Juntas somos más fuertes».
La movilización es un llamado a la acción colectiva para erradicar todo tipo de violencia. Si eres mujer, probablemente, hayas enfrentado algún tipo de violencia de género. Desde chistes estereotipados y comentarios invasivos en la calle hasta insultos o agresiones físicas, estas experiencias reflejan una problemática urgente.
El cambio comienza con la organización para construir mecanismos propios y exigir políticas públicas que enfrenten esta realidad.
El círculo de las flores
Como parte de la agenda, se presentó El círculo de las flores: guía de grupo de apoyo para mujeres expuestas a violencia de género. Este libro fue escrito por las psicólogas graduadas en la PUCE, Carolina Espinosa y Soledad Carrera, junto a la docente Graciela Ramírez como coautora de la obra.
La publicación resalta la importancia de la participación de las víctimas afectadas por violencia de género en las investigaciones. El intercambio de experiencias enriqueció la guía, que se empleará como un instrumento para la atención integral de las personas afectadas.
“Este tipo de enfoque nos invita a imaginar y construir realidades donde las mujeres puedan ejercer plena autonomía y dignidad. Más allá de una opción metodológica, investigar desde una perspectiva feminista es, ante todo, un acto de resistencia”, comentó Carolina.
Crear espacios libres de violencia no es solo una necesidad, es un compromiso colectivo. ¡Vivir seguras es un derecho no, un privilegio!
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